Fuente de los Caños
El agua forma parte indisoluble del paisaje agreste de la Sierra de Las Estancias o Sierra de Lúcar. No deja de ser significativo que el nombre del pueblo nos remita a una zona salvaje donde el agua estaba muy presente, no obstante el topónimo del pueblo proviene del nombre latino Lucus "el bosque sagrado" o una zona sagrada del bosque donde el agua tenía una singular importancia.
En torno al agua se desarrolla la vida doméstica, la economía, los rituales y el ocio, quedando una huella plasmada en el territorio y en el paisaje humanizado, es lo que sucede en el pueblo de Lúcar, cuyas fuentes constituyen uno de los elementos patrimoniales más interesantes del municipio y son símbolo identitario de la localidad. Las fuentes de Los Caños, El Marchalillo o El Molinillo son "Qanat", galerías drenantes cuyos orígenes parecen ser de época musulmana y que conforman un complejo y original sistema de captación de aguas subterráneas de un singular legado hidráulico.
En el caso que nos ocupa todas las galerías terminan en elementos patrimoniales de muy diverso uso como fuentes de abastecimiento público, lavaderos, abrevaderos y partidores de acequias para repartir el agua para el regadío, como la acequia de Los dos hilos, que fecunda a una fértil y esplendorosa vega y movía las piedras de varios molinos harineros Escenarios todos de una gran belleza.